El acusado sufre esquizofrenia paranoide y trató de asesinar al chico ante la sospecha de que fuese «un informante de los gitanos»: «Eres demasiado joven para morir, pero te voy a matar»
La Fiscalía del Principado de Asturias solicita una condena de 10 años de prisión para el procesado por cortarle el cuello a un menor de 15 años en Avilés en octubre de 2022. La vista oral está señalada para este martes, 12 de diciembre, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, con sede en Oviedo, a las 10.30 horas.
El Ministerio Fiscal sostiene que el 19 de octubre de 2022, sobre las 18.00 horas, el procesado salió de su domicilio llevando en su mano derecha un cuchillo de cocina con un filo de 8 centímetros de largo y 2 centímetros de ancho. Al llegar a la altura del colegio El Quirinal, en la calle Fernando de Morán de Avilés, vio sentado en uno de los bancos a la víctima, que en aquellas fechas tenía 15 años, y ante la sospecha que tenía de que el menor era «un informante de los gitanos», se dirigió al mismo y le dijo: «Eres demasiado joven para morir, pero te voy a matar».
Acto seguido, y sin que la víctima pudiera prever el ataque ni tampoco defenderse del mismo, le pasó el cuchillo por el cuello y le realizó un corte desde el lado izquierdo al lado derecho. También le lanzó una cuchillada a la altura del tronco, rompiéndole la sudadera y la camiseta, pero sin que llegar a rozar en la piel. A continuación, la víctima abandonó el lugar corriendo y pidiendo auxilio, perseguido por el procesado, que portaba en todo momento el cuchillo en su mano. En ese momento se personaron en el lugar dos agentes de la Policía Local, a los que el procesado dijo: «Os lo voy a clavar» (en alusión al cuchillo que aún llevaba en la mano), abalanzándose sobre ellos, si bien lograron reducirlo, empleando la mínima fuerza necesaria.
Como consecuencia de estos hechos, uno de los agentes sufrió lesiones en la cara interna de brazo derecho. El otro, en la cara anterior de ambas piernas. La Fiscalía señala en que en el momento de la comisión de los hechos, el procesado tenía diagnosticada esquizofrenia paranoide, enfermedad que le ocasionaba una severa afectación de sus facultades intelectuales y volitivas. El procesado se encuentra en situación de prisión provisional comunicada y sin fianza acordada por auto de 24 de octubre de 2022 del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 5 de Avilés.
La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato en grado de tentativa y un delito de atentado contra agentes de la autoridad en concurso con dos delitos leves de lesiones y concurre en el procesado la eximente incompleta de anomalía o alteración psíquica. Con todo, solicita que se imponga al procesado, por el primer delito una pena de 10 años de prisión, con inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, así como la medida de internamiento para tratamiento médico o de educación especial durante 10 años. Además, la medida de libertad vigilada durante un período de seis años, consistente en la obligación de «seguir tratamiento médico externo o de someterse a un control médico periódico».
Y por el segundo delito una pena de 1 año de prisión, con inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, así como la medida de internamiento para tratamiento médico o de educación especial durante 1 año. Además, la medida de libertad vigilada durante un período de 2 años, consistente en la obligación de seguir tratamiento médico externo o de someterse a un control médico periódico, así como el pago de costas procesales. En concepto de responsabilidad civil, el procesado deberá indemnizar a la víctima, a través de su legal representante, con 7.922 euros por las lesiones, secuelas, daños y perjuicios ocasionados al mismo; cantidad que deberá ser incrementada con los intereses legales correspondientes.
Igualmente, al primer agente de la Policía Local con 1.421, 52 euros por las lesiones ocasionadas; cantidad que deberá ser incrementada con los intereses legales correspondientes; y al segundo agente de la Policía Local con 1.200 euros por las lesiones ocasionadas, cantidad que deberá ser incrementada con los intereses legales correspondientes.