Mercedes García, que accedió al cuerpo en 1985, con solo 21 años, denunció en 2008 haber sufrido insultos machistas de algunos compañeros
La asturiana Mercedes García se convirtió hace casi cuatro décadas en la primera mujer policía local en Oviedo. Tenía solo 21 años cuando, en 1985, rompió todos los techos de cristal y accedió a su plaza en la capital asturiana. Natural de Trubia, García escribía entonces su nombre en la historia de la ciudad, la misma que este lunes ha homenajeado la valentía que siempre necesita quien abre camino al resto. Ha sido en un acto celebrado en el Palacio de Congresos Príncipe Felipe de Oviedo, al que, entre otras personalidades, han acudido la Delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa, y el alcalde de la ciudad, Alfredo Canteli.
Actualmente destinada en la Policía Local de Palma de Mallorca, la asturiana se ha mostrado muy satisfecha con el reconocimiento: «Es un honor para mí, un orgullo», ha declarado a los periodistas, agradecimiento que ha hecho extensible también a sus compañeros. Sin embargo, no todos ellos estuvieron a la altura de las circunstancias. Así se deriva del episodio de insultos del que fue víctima la policía por parte de algunos de sus compañeros de profesión en Oviedo, un caso que decidió llevar a los tribunales en 2008.
Los mensajes denunciados se distribuyeron por la emisora y fueron de tipo sexista y machista. A preguntas de los periodistas, García ha recordado que el Tribunal Supremo le dio entonces la razón y que, ahora, prefiere simplemente «pasar página». «No me gusta mirar al pasado, prefiero mirar al presente y centrarme en el futuro», ha contestado cuando ha sido preguntadas sobre si el homenaje recibido resarcía lo que sufrió en Oviedo.