Desde el Principado destacan la contribución final de la planta «a mejorar la seguridad energética de España y de Europa»
La estación regasificadora de El Musel podría estar a un suspiro de ver iniciada su vida útil. La directora general de Energía, Minería y Reactivación del Principado de Asturias, Belarmina Díaz, destacó ayer que es «cuestión de horas» que la planta cuente con el acta de puesta en servicio en modo de prueba. Esa fue su reflexión tras la resolución que recoge las condiciones técnicas para la operación de la planta, uno de los últimos trámites para la puesta en servicio de esta infraestructura.
Díaz incidió en que, de esta forma, culmina un «largo y muy complejo» proceso administrativo. Construida hace once años con una inversión de casi 400 millones, la planta permaneció largo tiempo parada y sin actividad, con importantes costes anuales de mantenimiento. La reciente decisión, de hecho, pondría fin a esa dilatada hibernación, y permite su operatividad «a la mayor brevedad». Tras unas semanas de pruebas, ya estaría lista para su normal funcionamiento, que imprimiría al conjunto una relevancia «económica, logística y energética».
En última instancia, para Díaz la estación «va a contribuir a mejorar la seguridad energética de España y de Europa», por lo que cree que es una «muy buena noticia» para Asturias.