El Principado alcanza los 72 casos de violencia filio-parental, es decir, aquella ejercida por los hijos hacia sus padres. La comunidad sigue lejos de datos de otras, como Andalucía, donde la cifra sobrepasa el millar
Toda forma de violencia es reprochable, pero hay algunas que, aún hoy, no dejan de ser un tabú. Es el caso de la violencia filio-parental, aquella que sufren los padres y madres por parte de sus hijos, y que en Asturias alcanzó en 2023 la cifra de 72 casos, según el último informe publicado por la Fundación Amigó. Se superan así los 57 casos del año anterior. Números siempre preocupantes pero que bien es cierto quedan lejos de los arrojados por otras comunidades. Así, en el contexto nacional, el informe detalla que se abrieron 4.416 expedientes de este tipo en el año 2023, siendo Andalucía (1.012), Madrid (764) y la Comunidad Valenciana (680) las comunidades con mayor número de incidentes.
La Fundación destaca que la violencia filio-parental, que abarca agresiones físicas, psicológicas o económicas, no es solo un desafío para quienes la sufren directamente, sino también un reflejo de contextos complejos. Factores como la exposición previa a la violencia, el consumo de sustancias (presente en el 49% de los casos) o problemas escolares pueden influir en este tipo de comportamientos. Además, el presentado desataca la importancia de trabajar desde la prevención y el apoyo a las familias. Tal y como señala la Fundación, abordar este problema requiere tanto sensibilización como herramientas específicas para ayudar a padres e hijos a reconstruir sus relaciones. Otro de los grandes retos en este sentido, parte de la necesidad de visibilizar esta realidad, que muchas veces queda oculta en el ámbito privado, y reforzar los recursos disponibles para quienes enfrentan estas difíciles situaciones.