“En cuanto a cantidad, no será el mejor año para la manzana en Asturias, pero su calidad será muy buena”
“En cuanto a cantidad, no será el mejor año para la manzana en Asturias, pero su calidad será muy buena”. Así lo explicaba esta mañana Jose María Díaz García, de la Finca Goleta, donde junto a su hijo José Ignacio ha atendido a los medios en una visita organizada por la DOP Sidra de Asturias. García, en sus 10 hectáreas de finca, espera recoger unas 150 toneladas de manzana.
Y es que a la circunstancia de tratarse de un año par (lo cual ya reduce la cantidad de manzana), se ha unido otros factores que han hecho disminuir la cosecha. A poco menos de un mes para el final de la temporada de recogida, ya se conoce, a ciencia cierta, que no se llegará a los 12 millones de kilos en Asturias que se obtuvieron en anteriores años pares.
De ellos, estima Daniel Ruiz, gerente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Sidra de Asturias, menos de tres se destinarán a la DOP, que cuenta con unas 950 hectáreas en el Principado. “Tenemos que concienciarnos. Sí, la DOP es algo más cara, pero cada vez que abrimos una botella estamos creando empleo y dejando el dinero aquí, en Asturias”, señalaba Ruiz durante una visita en la que también estuvo presente Jorge García, director de Producción Vegetal de Campoastur.
Y es que aún hoy mucha de la manzana utilizada para la sidra natural proviene de lugares como Galicia, León o Francia, país en el que la recogida está mucho más mecanizada y es más sencillo abaratar los costes. En Asturias, este proceso sigue respetando los dejes tradicionales. Pese a contar con maquinaria, como el caso de los propietarios de Goleta, la manzana sigue terminando en una cinta, ya dentro de la nave, donde se inspecciona para ofrecer solo las mejores piezas, aunando, de esta manera, tradición y modernidad. Algo que los visitantes pudieron constatar también en un segundo llagar, Arbesu, gestionado por Alfonso Arbesu Cimadevilla.