PSOE; IU y Podemos-Equo sacan adelante el texto en el Pleno de esta mañana, en el marco de un árido debate con las agrupaciones del bloque del centro y de la derecha
El Pleno gijonés ha aprobado este jueves el Reglamento de Acofensionalidad o Laicidad del Ayuntamiento de Gijón, entre críticas de algunos grupos de la oposición. El documento, que prohíbe la asistencia de los miembros de la Corporación a actos de índole religiosa en representación del Ayuntamiento, ha logrado los únicos apoyos de PSOE, IU y Podemos-Equo Gijón, mientras que el resto de formaciones votó en contra. El documento no limita, en cambio, que los ediles asistan a título personal.
Por parte de la portavoz del Gobierno local, Marina Pineda, se ha criticado la «prepotencia» de los grupos de la derecha por pensar, según ella, que están en posesión del pensamiento de la mayoría. Ha dejado claro, respecto al citado Reglamento, que busca garantizar la libertad de las personas y que el Ayuntamiento como institución no va atender «ninguna injerencia ni en positivo ni en negativo» con ninguna confesión religiosa, de forma que no se dará prevalencia a ninguna.
En el caso de Ciudadanos, el edil Rubén Pérez Carcedo ha acusado al portavoz de IU, Aurelio Martín, de haber vuelto a «imponer» su voluntad al lograr sacar adelante un documento que genera, a su juicio, «crispación» y que, a su modo de ver, «no sirve absolutamente para nada». Unido a ello, ha recalcado que el propio presidente regional, Adrián Barbón, ha avanzado que él seguirá acudiendo a la misa de Covadonga, así como el candidato socialista a la Alcaldía gijonesa, Luis Manuel Flórez ‘Floro’ ya indicó que acudirá a la Bendición de las Aguas de San Pedro.
A mayores, ha recalcado que el informe jurídico elaborado sobre el Reglamento no implica la prohibición de acudir de los ediles a actos religiosos, sino que tan solo si se invita a la corporación en su conjunto. Ha incidido, asimismo, en que este Reglamento tampoco impedirá que el próximo 16 de junio haya una Biblia y un crucifijo cuando los ediles tomen posesión de sus cargos. Pérez Carcedo, que se ha confesado laico, ha recalcado que no ve necesario ningún reglamento para que el Ayuntamiento siga siendo laico.
La portavoz de Podemos-Equo Gijón, Laura Tuero, ha defendido que este Reglamento vela por «la conciencia de igualdad» y no fija una religión por encima de otra. Y ante las críticas de Vox, le ha recordado a su portavoz que la coalición morada y verde obtuvo un 12 por ciento de votos en las pasadas elecciones mientras que el partido de Abascal un 7 por ciento.
En el caso del PP, la concejala Ángeles Fernández-Ahúja ha incidido en que este reglamento es «a todas luces un documento innecesario» que refleja un talante «sectario» del Gobierno local y que solo responde «a deseos y apetencias de una minoría social», ha criticado. Ha defendido, también, que no se vulneraría la Constitución por asistir a actos que forman parte de una tradición, como la Bendición de las Aguas de San Pedro. Se ha comprometido, por ello, ha suprimirlo si llegan a gobernar en la ciudad.
Por su parte, el portavoz de Vox, Eladio de la Concha, ha considerado, este Reglamento una concesión a grupos minoritarios como Asturias Laica o partidos minoritarios como Podemos, según él, para alcanzar pactos «de fin de temporada», ha asegurado. Este ha recalcado que la Constitución habla de libertad religiosa y este documento, en cambio, la «coarta», además de opinar que va en contra de una religión mayoritaria.
Finalmente, el edil no adscrito, Alberto López-Asenjo aportó serias dudas en cuanto a su posible «ayuda a la mejora de la convivencia».
