María de los Ángeles Riera, a la que todo el mundo conoce como Geli, lleva más de 50 años endulzando la Feria de Muestras con su receta única del arroz con leche
Hay días en los que se come sin ganas, con prisa, por puro trámite. Hay otros en los que sentarse a la mesa y llevar bocado a la boca nos regala uno de esos momentos de placer inenarrable e impagable. A la Casa del Arroz con leche se va a disfrutar de lo segundo. A los mandos María de los Ángeles Riera, conocida por todos como Geli, con más de 50 años de feria a sus espaldas.
«Empecé de azafata, cuando la Feria se hacía en la calle Manuel Llaneza, luego pasamos a lo que ahora es la Avenida de la Constitución, un conocido me dio la idea de montar el puesto de arroz con leche, y, entre unas cosas y otras, han pasado casi 50 ediciones de la Feria», explica Geli a este diario.
La receta no es original, arroz y leche siguen siendo la base de uno de los postres más socorridos en cualquier menú asturiano que se precie. Lo que marca la diferencia, como tantas veces, es ese toque que cada uno le pone. «El arroz con leche ya lo hacía muy bien mi abuela, luego pasó a hacerlo mi madre, y ahora yo», nos cuenta. Un círculo familiar que sigue en pie, ya que ahora son sus hijos y nietos los que arriman el hombro durante la Feria de Muestras.
50 años de recorrido que dan para mucho. Entre otras cosas, para ver crecer y crecer la feria, «en estos años no ha hecho más que crecer e ir a mejor», apunta. Crecimiento que se vio estancado el pasado año, con su cancelación, y ralentizado este, por el cotrol de aforo pero, sobre todo, por la reticencia de parte del público a acudir. Ante ello, Geli anima a todo el mundo a venir a la Feria, la edición más segura en su historia, como no se han cansado de repetir desde la organización en cada uno de los actos llevados a cabo.
«La gente poco a poco se va animando. Creo que tienen la idea en la cabeza de las aglomeraciones de otros años, pero ahora no es así, está muy controlado y muy limitado el aforo en todos los pabellones, por eso recomiendo a todo el mundo la visita. Además, al no haber las colas de otros años, se está muy agusto en el recinto».
Como anécdota, nos cuenta la historia de sus clientes más fieles, «son un grupo de Saldaña (Palencia) vienen todos los años a comer el arroz con leche. Hace un par de ediciones hasta les escuché decir: ‘mira, aquí sigue la señora'». Y sí, aquí sigue. Y es que, tal y como señala su hija Laura, «todavía hay Geli para rato».