El presunto autor, cuyo caso ha quedado visto para sentencia, utilizó su posición como dueño de un quiosco para ganarse la confianza del niño, de diez años en el momento de comenzar los hechos
La Fiscalía del Principado de Asturias, concretamente su Sección Territorial de Langreo, ha solicitado una pena de trece años de prisión, entre otras penas y medidas, para el hombre que este martes, en sesión a puerta cerrada celebrada en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, fue juzgado como presunto autor de una agresión sexual contra un niño a lo largo de dos años, en el interior del quiosco que regentaba en el concejo de Langreo. El caso ha quedado visto para sentencia.
El Ministerio Fiscal sostiene que en el verano de 2022 la víctima, nacida en 1992, comenzó a frecuentar el negocio del procesado, a su vez nacido en 1954. A partir de ese instante, y dada la corta edad del menor, el procesado fue ganándose su confianza hasta que, en un momento determinado, comenzó a agredirle sexualmente. Así ocurrió hasta el verano de 2004, cuando, antes de cumplir doce años, el niño tomó conciencia de lo que estaba pasando, y dejó de frecuentar el quiosco. Así las cosas, y al margen de la pena de cárcel, se solicita inhabilitación absoluta durante el tiempo de la condena, amén de la prohibición de aproximarse a menos de 200 metros, y de comunicarse por cualquier medio, con el menor. Tampoco se le permitirá acudir a su domicilio o lugar de trabajo durante catorce años.
Más aún, la postura de la Fiscalía contempla que, finalizado el tiempo en prisión, se le aplique al sujeto la medida de seis años de libertad vigilada, e inhabilitación especial para cualquier profesión, oficio o actividades, sean o no retribuidas, que conlleve contacto regular y directo con personas menores de edad, por espacio de dieciocho años. Finalmente, en concepto de responsabilidad civil el presunto agresor indemnizará a la víctima con 6.000 euros, más los intereses legales correspondientes.