Proyectos aquí y allá pero con un denominador común: Asturias como escenario
Alejandro Díaz fue, en 2012 y con 33 años, Premio Nacional Joven Empresario, galardón entregado por la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (CEAJE) por su labor al frente de Grupo Baldajos, empresa asturiana dedicada en su origen a la distribución, recauchutado y reparación de neumáticos
Casi diez años después, Alejandro sigue al frente de la compañía, que no ha dejado de crecer e innovar en todos estos años. Uno de sus últimos hitos fue la compra en 2020 de la red de puntos de venta de Pirelli en España, lo que hizo que integrase doce delegaciones y a 57 trabajadores. Un emprendedor que con solo 23 años comenzó con un proyecto que hoy en día es una de las grandes empresas de las región.
Preguntado sobre cómo ha llegado Baldajos a ser lo que hoy es, Díaz tira de equipo y del paso a paso, «probablemente han primado los aciertos de todo el equipo, de esa pequeña y gran familia que hemos ido formando a lo largo de todos estos años en los distintos proyectos donde el compromiso, el saber hacer, y las decisiones que hemos ido tomando, que nos han permitido ir disfrutando de ese crecimiento.
Hace 20 años, cuando decidió emprender, el contexto era ya distinto al de hace tres o cuatros años, pero estos dos últimos años de pandemia han acelerado todas las transformaciones. Como nos explica, la digitalización, las nuevas tecnologías, no solo han venido para quedarse sino que han generado una inercia de velocidad mucho más intensa de lo que se preveía años atrás, y esa velocidad, señala, da pie a repensar nuevos proyectos. Nuevos, porque después de 26 delegaciones repartidas por todo el país, Baldajos afronta el reto de sumarse a la movilidad sostenible, a través de HiMobility «pretendemos formar parte, en nuestra modesta medida, de ese cambio, esa solución para generaciones venideras que entienden la opción del vehículo compartido como una alternativa que prima porque tienen otras prioridades que no son las de tener un vehículo propio».
Proyectos aquí y allá pero con un denominador común: Asturias como escenario. La parte de retail de la empresa está en Avilés, la de industria y fabricación en Langreo, la de movilidad en Gijón, «entendemos que desde aquí podemos hacer cuanto menos pequeñas cosas». Y es que en ello es tajante:
«Existe ese viejo tópico de que parece que hay que marcharse a Madrid, o a una gran urbe, a emprender, pero creo que desde Asturias podemos llegar a operar en los mercados globales. Al margen de que puedan existir puntos de mejora, pocas regiones gozan de tantos atractivos y valores positivos como Asturias«.
La innovación es otro de los pilares sobre los que se sustenta Baldajos, «siempre decimos que inventamos poco, pero sí que tratamos de exportar prácticas y procesos de otros países, y tratar de implementarlo desde aquí, ser agentes que aporten valor a los clientes y a los productos que fabriquemos«. Y por ese punto pasa su futuro inmediato «tratar de seguir innovando, tratar de mejorar siempre».