PSOE, IU y Foro han secundado el planteamiento en un el Pleno en el que también se ha aprobado una iniciativa para instar al Principado a estudiar el impacto de la eólica marina en la pesca

La oposición colectiva a la construcción de una planta de pirólisis en las proximidades de El Musel ha quedado hoy reforzada por el flanco de la administración local. El grupo municipal de Podemos-Equo ha logrado en el Pleno ordinario de esta mañana que tanto el PSOE como IU y Foro apoyen una proposición con la que se buscaba un posicionamiento público de la corporación municipal en contra de dicha planta. Los restantes grupos político, en cambio, se abstuvieron. No obstante, frente a semejante éxito no ha salido adelante la segunda parte de la iniciativa, con la que la coalición pretendía evitar la construcción de viviendas en el ‘solarón’, lugar para el que plantean un gran ‘pulmón verde’. A ese respecto votaron a favor Podemos-Equo, Foro e IU, mientras que lo hicieron en contra PSOE y PP, y se abstuvieron Ciudadanos, Vox y el edil no adscrito, Alberto López-Asenjo.
La propuesta contempla que el Ayuntamiento se comprometa a impulsar un desarrollo económico e industrial basado «en un crecimiento vinculado a una industria limpia, posicionándose en contra de la instalación de empresas contaminante». También incluye promover desde lo público, en el antiguo solar de Naval Gijón, un espacio para el desarrollo de la ‘economía azul’, en línea con el objetivo de contribuir a lograr cero emisiones en 2050.
Por parte de Ciudadanos, el edil Rubén Pérez Carcedo ha alertado del riesgo de prevaricación si se rechaza una actividad legal, si bien ha afirmado estar en contra de industrias contaminantes. Su homólogo de Foro, Jesús Martínez Salvador, ha incidido en que a esta empresa la fue a buscar el Instituto de Desarrollo Económico del Principado (IDEPA), por lo que «no vale escudarse en una posible prevaricación para rechazar una planta que va a quemar 44 veces los plásticos que se generan en Asturias». Para él, la salud de los vecinos «es muy importante».
En contra de esta proposición, en cambio, se ha mostrado la portavoz del PP, Ángela Pumariega, quien ha llamado la atención sobre que, ahora que se aproximan las elecciones, se crea una «alarma social innecesaria» sobre una instalación que «no ha presentado en detalle su proyecto». Pumariega ha señalado que «lo de ponerse camisetas o sujetar pancartas lo deja para los populistas».
Ante todo ello, la portavoz de Podemos-Equo Xixón, Laura Tuero, ha recordado que fue el IDEPA, dependiente del gobierno regional, el que trajo a esta empresa «que es contaminante», mientras que el Consejo de Administración portuario «también lo consideró bien». Por su parte, la alcaldesa gijonesa, Ana González, dijo estar de acuerdo con la idea de un compromiso hacia un tipo de ciudad «vivible», pero ha opinado que la iniciativa es «un poco panfletillo», y ha recalcado que no es competencia municipal, pero que «el Consistorio sí puede decir que no se quieren actividades contaminantes ‘per se’, sino que defiende otro tipo de industrias limpias».

La corporación gijonesa, por otro lado, ha aprobado una proposición de Vox por la que el Pleno insta al gobierno regional a establecer informes de afección medioambiental previa a la instalación de los macroproyectos de energías renovables. El objetivo último es que se valore su impacto en el patrimonio natural, así como la compatibilidad del proyecto con los usos y actividades como la pesca, además de su futura contribución social, económica y medioambiental a la ciudad. De igual modo, la propuesta recoge animar al Principado a que, en caso de dictamen desfavorable, se paralice inmediatamente la instalación de cualquiera de tales macroproyectos.
También le insta a que promueva todas las fuentes de energía que contribuyan desde la región a alcanzar la soberanía energética de España con una planificación ordenada y que responda al interés nacional, «dejando a un lado intereses especulativos que puedan amenazar la sostenibilidad social, económica y medioambiental de nuestra región». Por último, pide al ejecutivo autonómico que, previamente a la instalación de los macroproyectos, se consulte a los municipios afectados sobre la idoneidad, o no, de su instalación, y se adjunte su resolución al informe de afección medioambiental para su consideración.
La proposición ha sido aprobada por mayoría absoluta, con los votos a favor de Vox, PSOE, Foro, IU y el edil no adscrito, Alberto López-Asenjo. E contra se han postulado Podemos-Equo Xixón, mientras que el PP y Ciudadanos han optado por abstenerse.
Desde Podemos-Equo Xixón Juan Chaves ha opinado que la eólica marina tiene impactos «mínimos y fácilmente mitigables». Dicho esto, y reconociendo que el pescador quiere certezas sobre si va a poder seguir con su actividad, ha recalcado que ya se hace «una diferenciación de actividades primitivas a la hora de seleccionar la ubicación». Por parte del Gobierno local el portavoz de IU, Aurelio Martín, aun no coincidiendo con todo el texto de la iniciativa, ha apuntado que sí creen que hay un problema, ha incidido en que el principio de precaución obliga a especificar «un poco más» las consecuencias, y ha concluido indicando que la flota asturiana «es fundamentalmente de bajura, lo que genera sostenibilidad en el ámbito marino y economía en los puertos».
En el caso del PP, su portavoz cree que en Asturias se dan condiciones para el desarrollo de esta «actividad de futuro», según ella, pero cree que no debe ser «a costa de la actividad pesquera». Por último, Ciudadanos se mostró a favor de la eólica marina, pero al mismo tiempo ve importante proteger la pesca, como así defendido, por su lado, Foro.