
«Seguro que les suena que el autobús va a subir, prácticamente el doble por viaje. Si no les suena y se están enterando ahora mismo, si me acompañan brevemente, les voy a intentar explicar el porqué, con pelos y señales»

Si han leído la prensa estos días, seguro que les suena que el autobús va a subir, prácticamente el doble por viaje. Si no les suena y se están enterando ahora mismo, si me acompañan brevemente, les voy a intentar explicar el porqué, con pelos y señales. Quédense con este dato: el año pasado, 20.800.000 viajes en bus se beneficiaron de tarifa reducida con estas ayudas, que se perderán a partir del 1 de julio.
La clave del asunto es que el Ayuntamiento se ha ido retrasando en activar la Zona de Bajas Emisiones de La Calzada, una condición imprescindible en la última convocatoria de ayudas al transporte público. Estas subvenciones no solo afectan al autobús, también incluyen ahora el servicio público de bicicletas, #GijónBici. Ya expliqué en su momento qué es una Zona de Bajas Emisiones (ZBE a partir de ahora), para qué sirve y por qué se exige. En este artículo, lo que quiero es que entendamos la secuencia de hechos que nos ha llevado hasta aquí.
Estas ayudas se crearon en 2020, tras el encarecimiento del gas provocado por la invasión de Ucrania. El objetivo era reducir la dependencia de los combustibles fósiles y, con ello, las emisiones contaminantes, avanzando hacia los objetivos climáticos. El Ministerio cubre el 30% del precio para viajeros habituales, y obliga a los ayuntamientos a aportar un 20% adicional.
Al inicio de esta legislatura se celebró haber tumbado la Ordenanza de Movilidad Sostenible de 2021. Entre las medidas que ‘no gustaban’ —y que, curiosamente, la DGT ha ido implantando después— estaban las restricciones de aparcamiento según la etiqueta ambiental del vehículo. En aquel momento, hace casi tres años, había más coches sin distintivo que ahora. El tiempo pasa, el parque móvil se renueva, y la mayoría de esos vehículos sin etiqueta superan ya los 20 años.
Y esto tiene mucho que ver con la situación actual. El Ayuntamiento no sólo heredó los fondos para implantar la ZBE y realizar obras de mejora en la zona, así como la instrumentación necesaria, también contaba ya con un trabajo normativo avanzado que habría facilitado su puesta en marcha. Ese trabajo estaba reflejado en la ordenanza que se tumbó. Hoy, probablemente no sería necesario improvisar un anexo sobre una ordenanza obsoleta de 2002 que, además, sigue sin actualizarse. Primera zancadilla autoimpuesta.
Por ahora, lo único aprobado es el proyecto técnico, que incluye medidas claramente contradictorias con el espíritu de una ZBE,rozando incluso el fraude. Por ejemplo, se plantea no restringir la circulación a vehículos contaminantes no residentes, salvo en episodios de contaminación vinculados al plan de calidad del aire de la zona oeste, que nada tiene que ver con el tráfico, ya que su origen es industrial. Y aún más grave: el documento promete que, incluso una vez activada la ZBE, no se impondrán sanciones hasta 2028.
Me imagino que ya empiezan a intuir por qué se hacen los remolones con toda esta documentación y no quieren activar la ZBE, tres años después y tras sendas cartas de aviso, incluso del Defensor del Pueblo: no quieren implantar ni una sola medida que afecte a los vehículos contaminantes, aunque eso suponga poner en juego la salud y el dinero del resto.
Uno de los argumentos recurrentes es que la ZBE perjudica sobre todo a las rentas más bajas, porque son quienes más usan el coche para trabajar. Pero esta media verdad se desmonta fácilmente. Es cierto que cambiar de coche cuesta más cuanto menor es la renta, pero cada vez son menos quienes conducen a diario vehículos tan antiguos como para no tener pegatina. Superada la vida útil y con un uso constante, mantener uno de estos coches puede salir tan caro como adquirir uno más moderno, aunque sea de segunda mano, con una etiqueta ambiental que les permita circular. Según el propio proyecto técnico, solo un 12% del parque móvil de Gijón se quedaría sin distintivo, y ese porcentaje irá bajando con el tiempo. Además, la circulación de vehículos residentes está permitida, tengan o no etiqueta, por lo que el nivel real de afectación sería muy bajo. Y no hay que olvidar que La Calzada es también uno de los barrios donde más se camina, se usa el autobús o el servicio municipal de bicicletas, precisamente porque la oferta es amplia y, en general, las rentas más bajas recurren más a estos medios.
Otro de los argumentos se apoya en el compromiso recogido en el Plan de Movilidad Sostenible, un documento al que no le dan valor…, pero tampoco derogan, porque aunque no es vinculante, sí es obligatorio tenerlo. En él, firmado por la anterior corporación, se decía que la ZBE no se activaría hasta resolver el vial de Jove, es decir, hasta encontrar una solución para desviar los camiones y vehículos que cruzan la avenida Príncipe de Asturias. Un problema complejo, porque implica a varias administraciones: al fin y al cabo, se trata de una carretera nacional clave para el acceso al puerto. En aquel momento todo parecía encarrilado, pero la realidad se impuso, y hoy estamos, más o menos, de vuelta en la casilla de salida. Ese viejo compromiso se utiliza ahora como escudo para no activar la ZBE. Pero…, ¿se acuerdan del Muro soterrado? ¿Del Central Park gijonés en el Solarón? Pues eso: promesas de campaña, feas todas ellas. Y en este caso, ni siquiera vinculantes, porque como ya apunté, este documento no lo es.
¿Influye realmente que sigan pasando camiones y coches por esa vía? Claro que sí: es uno de los grandes problemas ambientales del barrio. Pero eso no significa que la ZBE no vaya a suponer una mejora. Todo lo que se pueda rascar, bienvenido sea. De hecho, en el propio proyecto técnico se menciona que la intervención en la Ecomanzana ya está cumpliendo parcialmente ese objetivo. Es evidente que la zona sufre varios focos de contaminación, y es comprensible que las vecinas y vecinos estén más que hartos. Pero la realidad es compleja: o se busca una solución conjunta entre todas las administraciones implicadas, o lo único viable por ahora es aprovechar cada avance posible. La ZBE es objetivamente una oportunidad.
En conclusión, la subida del precio del autobús y la renuncia a bonificar el uso de #GijónBici tienen su origen en la negativa —o en la interrupción deliberada— de medidas obligatorias que limitarían, aunque fuera mínimamente, el uso del coche para mejorar el transporte público y las condiciones ambientales, en una parte relativamente pequeña de la ciudad. Un barrio que no solo necesita medidas urgentes de todo tipo, sino que además es de los que más usa el transporte público y el que paradójicamente más va a sufrir esta subida.
No se puede explicar mejor. Felicidades de nuevo por ser tan clarificador.
Si como usted dice «Por ejemplo, se plantea no restringir la circulación a vehículos contaminantes no residentes, salvo en episodios de contaminación vinculados al plan de calidad del aire de la zona oeste, que nada tiene que ver con el tráfico, ya que su origen es industrial». Y «Plan de Movilidad Sostenible, un documento al que no le dan valor…, pero tampoco derogan, porque aunque no es vinculante, sí es obligatorio tenerlo. En él, firmado por la anterior corporación, se decía que la ZBE no se activaría hasta resolver el vial de Jove, es decir, hasta encontrar una solución para desviar los camiones y vehículos que cruzan la avenida Príncipe de Asturias. Un problema complejo, porque implica a varias administraciones».
¿Que sentido tiene poner una ZEB en La Calzada? El problema no son los vehículos como usted dice.
Pues llévense la ZEB a otro lado. O que las administraciones responsables tomen las medidas que deberían antes de instaurar una ZEB.
Sí como usted dice esto mejoraría mínimamente la calidad del aire para los vecinos, igual habría que poner más el foco en porque no se mejora máximamente, pero claro eso implica decir que el PSOE de Gijón, Asturias y nacional por enésima vez se rien de nosotros,como con la estación de tren o ahora el puerto y prometen en campaña para después no hacer nada, en este caso sacar los camiones al puerto que es lo que realmente contamina la zona . Igual y solo igual el gobierno de Gijón está haciendo lo que prometió en campaña, no mintiendo cada cuatro años para que hooligans y palmeros se tragen lo que sea y se les pase con una pomadita. En cuanto a la subida del bus si el vial de Jove estuviera en marcha ,y no lo está porque el PSOE mintió pues no subiría y la ZBE se aplicaría normalmente.
Cuenta con los dedos que está haciendo la Moriyon de lo que prometió en campaña, a parte de tener al cochista mayor asfaltando praos. Se fue a Portuarios con la pancarta de la contaminación del puerto y bla, bla. ¿Cambio algo la contaminación de la zona? Pero si solo va a dar explicaciones a Somio. ¿La viste alguna vez en la Calzada?
Carril bici del Muro: Moriyon.
Carril bici de Poniente: Moriyon.
Carril bici del Solaron: Moriyon.
Carril bici Molinon/Piles: Moriyon.
Antes de llamar «cochista» a alguien debemos informarnos un poquitín. Pero bueno seguimos con ese mantra que a base repetirlo quizás engañéis a alguien.
Por cierto en esa zona de La Calzada yo prohibiría fumar a todos los residentes porque contaminan y suben los niveles de CO2
Moraleja: A mí me duplican el precio del autobús todos los días
Coge tarjeta CONECTA.
Para el Principado la ZBE funciona!!!
Ganan todos
Que tendrá que ver el vial de Jove (que no se hará nunca), con que nos dupliquen el precio de 20.800.000 billetes anuales de autobús. Al gobierno municipal le da igual porque ninguno de esos 20.800.000 billetes anuales son adquiridos por ellos. Los currantes seremos los que pagaremos esta sinrazón.
Mira que somos aficionados al Síndrome de Procusto, incluso en la elaboración de ese aparente «Proyecto Técnico». El mantenimiento y averías de un coche antiguo siempre, siempre, es más económico que la adquisición de uno más moderno, ya no digo si es nuevo, con el disparate de precios actual. Algo serio que puede ocurrir, por ejemplo, son 1.000 euros de un embrague, 1.500 de un FAP (tenerlo ya concede etiqueta), etc; que es una faena importante pero es menos caro que pensar en achatarrar y buscar otro. Por eso la gente repara y sigue tirando en su vida con un coche así. La adquisición de otro más moderno con pegatina puede representar, ¿cuánto?, ¿24 o 36 cuotas de unos 200 euros de un préstamo personal para adquirir algo decente de segunda mano? Y eso en el supuesto de que se conceda un préstamo a estas llamadas «rentas bajas». ¿Un coche antiguo tiene reparaciones todos los años por esa cantidad de dinero? Estamos viviendo una época en que el relato mata al dato, pero no hay nada más tozudo que la realidad, una trituradora de sesgos de confirmación.
Entonces ¿porqué solo el 12% por ciento del material rodante ya no tiene pegatina?, vaya trola. El que escribe también habla de que puedes comprar uno de segunda mano con pegatina y es lo que hace mucha gente porque si no tienes dinero para mantenerlo, con mucho uso se caen a cachos. Incluso de que si eres de la zona, no tienes que achatarrar nada. Es tocaros el coche y es lo único que importa por encima de todo lo demás y ni los argumentos valen.
Cito textualmente: «Superada la vida útil y con un uso constante, mantener uno de estos coches puede salir tan caro como adquirir uno más moderno, aunque sea de segunda mano, con una etiqueta ambiental que les permita circular.» Esto no es cierto, como expongo con números en mi anterior comentario, es más caro pagar préstamos para la compra (incluso de segunda mano) que los gastos de mantenimiento y averías de un coche antiguo: no tienen averías de 200 o 300 euros TODOS los meses durante 3 o 4 años.
«Según el propio proyecto técnico, solo un 12% del parque móvil de Gijón se quedaría sin distintivo, y ese porcentaje irá bajando con el tiempo.» Esto es una estimación de FUTURO («se quedaría»), no dice que esto sea AHORA MISMO. De nuevo un buen relato para matar al dato y así estimular a la gente que lee mal y deprisa.
La trola es que «sólo el 12% del material rodante YA NO TIENE pegatina». Cito textualmente del artículo: «Según el propio proyecto técnico, solo un 12% del parque móvil de Gijón se quedaría sin distintivo, y ese porcentaje irá bajando con el tiempo.» El proyecto hace una previsión de FUTURO, no son datos de ahora mismo. Hay que leer mejor y más despacio.
No dice eso pero puedes facer que el tiempo no pase para que te siga dando la razón. Vete luego a un concesionario a preguntar por un coche urbano de gasolina y otro eléctrico, porque básicamente no hay diferencia ya. Y luego de paso explicas porque hay dentro de la ecomanzana más de una bolsa que tiene la renta del centro, aproximándose a la de Viesques. Si quieres hacer estimaciones, facemosles pero me parez que el discurso esi de obrero y coche, va a sufrir.
De que ye el barrio que más garra el autobús, como dicen, ni hablar que eso no ye lo tuyo
¿No dice eso? Te hago un copia/pega TEXTUAL del artículo y ¿dices que no dice eso? Procusto, tío, sesgo de confirmación de libro. Así nos va.
Las estimaciones las hace el «Proyecto Técnico», no yo.
El discurso de «obrero y coche» lo vivió en propias carnes la anterior corporación, que logró poner a disposición unas ayudas a la compra de vehículos con distintivo ambiental, de forma que eran 150 ayudas de 1.000 euros. Un año más tarde, de 150 se solicitaron 7 y, de esas, se concedieron 4. La gente no cambia de coche por romanticismo, es que no pueden, metéroslo en la cabeza. Buscad en la hemeroteca, si no lo podéis creer.
Que yo no dudo de las buenas intenciones, pero no se puede vivir en los mundos de Yupi de las buenas intenciones. Insisto: el mundo real es una trituradora de relatos, por bonitos que sean.
Si se va a la fuente primaria de esa información (el informe de la ZBE), vería que el 12% se refiere al 12 % del parque circulante de la Calzada en 3 campañas de levantamiento que se hicieron en Junio de 2024. Los datos no son de ahora mismo, sino que tienen ya casi un año. Eso es leer mejor y más despacio.
Acudamos a la fuente primaria, acudamos para leer mejor y más despacio:
https://sedeelectronica.gijon.es/sta/docs/GetDocumentServlet?CUD=15251121443565027364&HASH_CUD=5e5f4b4f0da4c0b02419ff7d01810a3a51faac73
Entre las páginas 54 a 60 se encuentra el análisis del discutido 12%. Con datos de censo (IVTM), se sabe que el 25% de los coches censados en La Calzada no tienen derecho a distintivo medioambiental. Luego se hicieron tres campañas de toma de datos leyendo matrículas con cámaras para determinar que sólo el 54% de lo que CIRCULA en La Calzada ESTÁ CENSADO en Gijón.
Y ya; el 12% no se sabe de dónde sale.
Porque si se justificase que «el 12% de las matrículas leidas circulando por La Calzada no tienen distintivo ambiental», pues me corrijo y aprendo. Pero no, aparece un 12% de la nada.
Calculadora en mano, más bien parece que, al haber constatado que la mitad de lo que circula en La Calzada, está censado fuera de Gijón, pues dividimos a la mitad ese 25% de coches sin etiqueta de La Calzada, le quito los decimales y ya tengo una cifra que mola más. Yupi.
Pero es que ese 25% de coches censados existen todos, y la realidad es que, a todo lo que circula en La Calzada que es de La Calzada, hay que sumar ese 46% de FUERA de La Calzada.
Síndrome de Lecho de Procusto en luces de neón.
Rascar un poco de Nitrógeno de la contaminación con tu viejo coche. Sustitúyelo
Vender que multar es bueno y quitar subvención bus como castigo, fomentando el efecto contrario a lo buscado: más tráfico y menos transporte público
Coherencia ideológica y científica.
No les arriendo la ganancia… Sigan