El enfrentamiento se produjo en la plaza de Jacques Cousteau, a pocos metros de las dependencias de la Guardia Civil, que fue la primera en reaccionar
No cabe duda de que, más a menudo de lo que sería recomendable, las tensiones familiares se escapan de las manos. Y eso es precisamente lo que sucedió el pasado domingo en la plaza de Jacques Cousteau, sita en el barrio gijonés de Contrueces; varios miembros de una misma familia protagonizaron allí una espectacular trifulca, motivada por diferencias personales, que fue disuelta por agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional. Las razones no han trascendido.
La pelea se desató a escasos metros del cuartel que la Benemérita mantiene en el lugar. Por ello, aun estando la zona bajo la jurisdicción de la Policía Nacional, fueron los uniformados del instituto armado los primeros en intervenir para disolver el conflicto, hasta la llegada de sus compañeros del cuerpo policial nacional. Finalmente, no se produjo ninguna detención, ni hubo que lamentar daños personales serios, si bien una mujer hubo de ser atendida por un golpe en la cabeza.